¿Necesito una Endodoncia?
AGENDE SU CITA HOY
Dolor:
El cual puede variar de ser poco doloroso a ser un dolor extremo e intolerable, puede presentarse como un latido que tuviera su propio ritmo. El cómo se desarrolle o se presente el cuadro cambia si se cambia de postura, acostarse, ponerse de pie, sentarse etc. También puede aparecer como respuesta a un estímulo como el masticar, presionar o dar golpecitos al diente y también puede aparecer de manera espontánea.
El factor que desencadene el cuadro de dolor puede ser un cambio de temperatura como comidas o bebidas frías o calientes aunque hay ocasiones en que el calor de los alimentos o líquidos que ingiera aumenten la molestia en el diente y se aminoren con bebidas frías e incluso el hielo podría aminorar el dolor.
El dolor persiste por algún tiempo que puede variar desde minutos hasta horas manteniéndose de modo intenso.
También si el dolor es tan intenso puede despertar a la persona de un profundo sueño.
El dolor es detectado exactamente en donde aparece, en otras ocasiones el paciente sólo acierta a decir que lado de la boca le duele sin reconocer cual diente es el del problema e inclusive no sabe si es en la parte superior o inferior de la boca.
Inflamación o sensibilidad de la encía:
La inflamación no ocurre en todos los casos, pero puede presentarse desde muy ligera, en la cual el área se ve de forma normal y sólo hay poca sensibilidad, hasta presentarse de un modo muy pronunciado, siendo este también desde una bolita que el paciente puede sentir, hasta una inflamación completa del área afectada que se extienda hasta la cara y el cuello.
Hay ocasiones en que solo se sentirá el diente elevado de su lugar comparado con los de los lados y esto es también debido a la inflamación.
Es muy importante el poner atención si hay inflamación parecida a una "espinilla" y que esta produzca pus de la encía, ya que es lo que se lo conoce popularmente como postemilla.
Cambio de color en el diente:
El cambio de color en un diente de forma individual, es indicativo de que algo no anda bien en el espacio de la pulpa ; este aspecto del diente es lo que hace regularmente al odontólogo pensar que el diente necesita un tratamiento de endodoncia.
Este fenómeno es muy común en dientes que han experimentado un traumatismo y se puede manifestar varios años después del incidente inicial sin manifestar ningún otro síntoma como dolor o inflamación.